Hoy 14 de junio, se conmemora el vigésimo aniversario del Día Mundial del Donante Voluntario de Sangre. Este año tiene como lema celebrar la generosidad y dar las gracias a todos donantes de sangre.

Para conocer más al respecto, la Dra. Sofía Bonetti, Jefa del Servicio de Medicina Transfusional de Grupo Gamma, nos informa acerca de la importancia de constituirse en donante voluntario de sangre habitualmente. 

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¿Por qué es tan importante la conmemoración de un Día Mundial del Donante Voluntario de Sangre?

Se ha tomado el 14 de junio como la celebración del Día Mundial justamente para recordar y hacer notar esta actitud del donante con el objetivo de que se convierta en voluntario.

La fecha se eligió hace muchos años, recordando el nacimiento de Karl Landsteiner, quien fue un médico y biólogo que descubrió los grupos sanguíneos y que años después recibió el premio Nobel.

Como toda conmemoración, genera que el tema se vuelva a tratar más frecuentemente que en los días comunes y, a su vez, es importante para analizar la realidad que estamos viviendo, qué pasa en un sitio y en otro.

El hecho de festejar hace que la gente pueda reflexionar, se acerque a la temática y, así, se estimula esta acción solidaria.

¿Por qué es importante constituirse en donante voluntario de forma habitual?

Es importante pasar de ser una persona que va a donar sangre aisladamente, como mucha gente en la comunidad lo hace porque se le pide o porque un familiar o amigo lo necesita, a ser un donante habitual.

Al repetir la donación, esa persona empieza a pensar que cumple las condiciones básicas respecto a su salud, que no padece ninguna enfermedad y que su sangre no conlleva ciertos riesgos para quien la recibe.

Todos estos aspectos hacen que hablemos de una transfusión segura, de una práctica transfusional segura, lo cual está estadísticamente demostrado: se ha visto que disminuye la incidencia de algunas infecciones, transmisibles por sangre, con donantes frecuentes respecto al que dona por primera vez y que desconoce algunas situaciones por las cuales no debiera donar.

Afortunadamente, se cuenta con estudios para poder detectar estas infecciones, un screening previo al uso de esa sangre.

Con la donación voluntaria, la incidencia de estos virus o baterías, generalmente, disminuye a un porcentaje muy pequeño.

Entonces se transforma en donante voluntario y eso genera que nosotros en los Servicios y en la práctica médica habitual tengamos sangre segura.

¿Cuáles son algunos de los mitos y miedos más frecuentes que aparecen a la hora de donar sangre?

Se ha visto más en la gente mayor. Hemos observado que en los jóvenes ya no se transmiten y se están abandonando ciertos mitos.

• Por ejemplo, un mito era que no te vas a sentir bien, que si vas a donar sangre todo ese día deberás tener mucho cuidado, te vas a sentir cansado y no vas a poder realizar las tareas comunes.
• Otro era que si donabas mucho, y muy frecuentemente, engordabas.
• También miedo a contagiarse algo por la utilización del material, porque te pinchan una vena, sin embargo todo es material descartable de único uso, absolutamente seguro.
• Otro era que sufrirás anemia sí o sí, que vas quedar con una pérdida de sangre.

Y en contraposición, las verdades de la donación de sangre…

Y la verdad es que nos gustaría mucho que la comunidad empiece a tener información correcta de cuándo acercarse a donar y así pueda decir: “No, yo no puedo donar, porque tengo una enfermedad cardíaca, estoy tomando tales medicamentos y no voy a poder”

O “Ya han detectado una infección en mi que no voy a revertir por más que me haya curado”, por ejemplo la Hepatitis, fundamentalmente las B y C.

Hay una serie de condiciones a grandes rasgos, muy generales, luego hay puntos mucho más específicos que manejamos con una normativa, que se actualiza permanentemente en reuniones de consenso. Así, llegan personas que conocen si estan o no en condiciones.

Además, al llegar se les hace una entrevista muy tranquila, donde se revisan antecedentes, y ahí se chequean muchos más puntos.

Luego, siempre se toma la presión arterial, se hace una prueba muy simple y rápida para descartar que la persona tenga anemia, y así transmitir tranquilidad, que existen estos controles.

Es decir, cuidamos a la persona.

Otra cuestión era donar en ayunas que se ha cambiado y es fundamental en cuanto a la tolerancia. La ingesta de líquidos, de algo dulce, y hasta contemplar cuestiones que tienen que ver con lo emocional.

Buscamos que el donante se sienta cómodo, esté tranquilo, sea un ámbito aireado: que sepa que lo vamos a cuidar.

Para que conozcan quienes pueden ser donantes habituales, ¿Cada cuánto puede donar una persona?

Una mujer puede donar hasta 3 veces al año, un hombre hasta 4 veces como máximo, separadas entre una donación y otra por un mínimo de dos meses. O sea antes de las 8 semanas no debería repetir la donación y así está normatizado.

Con respecto a la situación de la donación voluntaria, comparado con pocos años previos, estamos mucho mejor, se habla más, si bien no lo encontramos diariamente, el tema se difunde mucho más.

Hay actividades de concientización que se llevan a cabo en diferentes lugares, inclusive la extracción de donantes fuera de las instituciones hospitalarias y sanatoriales, que las llamamos colectas extra muro.

Lo que se comenzó a hacer el año pasado es compartir esas colectas externas entre varias instituciones, que verdaderamente es ideal y en las cuales están involucradas entidades de la comunidad, como Organizaciones No Gubernamentales (ONGS) e instituciones educativas.