La Lic. María Victoria Arango, coordinadora de la Unidad de Endometriosis y Dolor Pélvico Crónico, Staff del Servicio de Nutrición de Grupo Gamma, explica por qué la nutrición materna durante el período de gestación, es un pilar fundamental para un correcto desarrollo y crecimiento del bebé, además brinda recomendaciones para sobrellevar las altas temperaturas.

---

La base de una nutrición materna óptima

Durante el embarazo, la hidratación diaria y la alimentación son dos pilares fundamentales para asegurar el bienestar de la mama y por consiguiente el desarrollo saludable del bebé. Ambos factores influyen de manera significativa en diversas etapas de la gestación y tienen un impacto a largo plazo en la salud del niño.

En primer lugar, una adecuada nutrición comprende abundantes frutas y vegetales, proteínas de calidad, como carne de vaca, cerdo, pollo, huevos y legumbres; también el correcto aporte de alimentos fuentes de omega como pescados, frutos secos, aceite de oliva, palta, aceitunas, entre otros. Estos alimentos son esenciales para la salud de la mamá y del bebé.

Además, debemos tener presente que es muy importante evitar las enfermedades transmitidas por alimentos, razón por la cual, hay algunos consejos a seguir:

• Higiene de los alimentos: sanitizar correctamente frutas y verduras con agua segura, potable.
• Cocción segura: cocinar muy bien las carnes y evitar la ingesta de alimentos crudos o poco cocidos como por ejemplo el sushi.

Nutrición materna segura en verano

Como ya mencionamos, la hidratación debe ser diaria y constante durante todo el embarazo. Pero en épocas donde las temperaturas son altas, tomar agua (segura, potable) ayudará a mantener la elasticidad de la piel, a prevenir la aparición de estrías, aliviar la retención de líquidos, además contribuye a regular la temperatura corporal y el estreñimiento típico del embarazo, sostiene la Lic. Victoria Arango. 

Será clave también, sentirse cómoda y fresca a la hora de vestirse; para ello la recomendación es utilizar ropa clara de algodón o lino, ya que permite la transpiración, un mecanismo que utiliza nuestro cuerpo para disipar la temperatura. 

¿Qué pasa con la actividad física? 

En principio y siempre con la supervisión de un profesional, es aconsejable que las mujeres en gestación realicen regularmente alguna actividad.

La Lic. Victoria Arango considera muy importante preparar el cuerpo para la gestación, por lo cual siempre aconseja comenzar con ejercicios de fuerza 3 meses antes de la búsqueda gestacional.

En época de verano, se sugiere entrenar por la mañana temprano o por la tarde luego de las 18.00 h para evitar las temperaturas extremas y sofocantes.

La guía de un profesional

A modo de conclusión, la Licenciada Arango nos dice, si la mujer embarazada está cursando el primer trimestre y tiene síntomas como náuseas o vómitos, es muy importante adecuar su nutrición para evitar que se deshidrate.

El embarazo es un momento fisiológico en el cuál se “programa” al bebé por nacer para que pueda desplegar todo su potencial genético, es una etapa de mucha demanda de nutrientes, por ello es importante guiarse con profesionales de la Nutrición idóneos.