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El otoño trae consigo un sinfín de alergias. La Dra. Paola Rebeca Schmidt, del Servicio de Alergia de Grupo Gamma nos brinda información para conocer en detalle de qué hablamos cuando decimos urticaria.

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¿Qué es la urticaria?

Las urticarias constituyen una de las veinte enfermedades cutáneas más frecuentes. En algún momento de la vida, más del 20% de la población general tendrá un episodio de urticaria, angioedema, o ambos.

La lesión de urticaria puede resultar sencilla de identificar a primera vista.

•  Habones: Se trata de una pápula (elevación circunscripta de la piel) de coloración eritematosa (rosada), tamaño y forma variable, que pica y se conoce como “roncha”. Las ronchas son evanescentes, no permanecen más de 24 horas y la respuesta al prurito (picazón), por rascado con frotamiento, no lastima la piel.
•  Angioedema (hinchazón): muy frecuentemente acompaña a la urticaria, se expresa como una deformidad, reflejo del edema más profundo, que ocurre en cualquier parte del tegumento y puede comprometer el tracto respiratorio. Suele tener una resolución más lenta que las lesiones de urticaria y manifestarse como una desagradable sensación de distensión, no necesariamente pruriginosa.

¿Cómo se clasifican?

Según la duración de los síntomas, la urticaria se divide en dos tipos principales:

•  Aguda: es aquella que dura menos de 6 semanas.
•  Crónica: es aquella que persiste por un período mayor de 6 semanas.

Los pacientes tienen UC intermitente o recurrente cuando los síntomas son persistentes pero interrumpidos por intervalos libres, de pocos días de duración. Presenta una prevalencia de con una prevalencia del 20% para la urticaria aguda y del 0,5-1% para la crónica

¿Cuáles son causas?

Las causas más frecuentes en urticaria aguda son:

•  Fármacos: antiinflamatorios no esteroides, antibióticos betalactámicos, etc.)
•  Alimentos (leche, huevo, frutos secos, pescados, mariscos, etc.)
•  Picaduras de himenópteros (hormiga, abeja, avispa)
•  Infecciones (vía aérea superior: angina, laringitis, de vía aérea inferior como neumonía, bronquitos, etc.)

 Con respecto a la etiología en urticaria crónica las podemos clasificar en:

•  Inmunes: Alérgicas (Ig E dependientes): alimentos, fármacos; Autoinmunes: por enfermedades de origen autoinmunitario (Artritis reumatoide, tiroiditis, etc.); Urticaria vasculitis ( mediadas por complejos inmunes)
•  No inmunológicas: drogas como opioides, alcohol, etc.
•  Físicas: calor, frío, solar, aquagénica, presión, colinérgica, vibración, de contacto.
•  Idiopática: en la cual se desconoce la causa.

El papel del alergólogo será, en primer lugar, determinar el diagnóstico correcto e identificar la causa. Posteriormente, prescribir un tratamiento eficaz para controlar los síntomas y educar al paciente sobre su afección y como tratar las manifestaciones más graves del angioedema como el edema de lengua. Por último, evaluar la actividad de la urticaria crónica, su impacto y su control.